El lunes dije que me sentía como Sawyer en la isla de Perdidos. Hoy viernes no. Por seguir con la analogía de Perdidos, sería algo así como Jin. Que está por ahí, se involucra en muchas cosas, pero no entiende una mierda lo que pasa. No ya porque la isla es misteriosa y tal, sino porque habla otro idioma y apenas logra comunicarse con los demás. Siempre me resultó irónico que fuese el hijo de un pescador, ya que se pasa el día "pescando".... sí, vale, no tiene ninguna gracia :P
Llevo toda la semana a mi bola, de un lado para otro, casi todo el tiempo solo. Estudiando. O algo así, que es que me siento taaaaaan gilipollas estudiando fonética del inglés y diciendo en voz alta cosas como "rech", "clack", "claen" o similares... He vuelto a tocar el órgano. Hacía como 2 años que no lo hacía. Cualquier cosa por no estudiar. Qué rolloooo...
Esta semana, tras la vuelta de las vacaciones de Semana Santa, se me ha presentado por primera vez la sensación de estar perdiendo el tiempo estudiando magisterio. Seguramente será agobio temporal o algo así. Es que los profesores de este cuatrimestre son lo puto peor. Una que nos trata como si tuviéramos 6 años. Otro que no tiene ni puta idea de lo que da. Uno que apesta (literalmente). Los de psicología que es que viene uno distinto cada semana (aunque parece que nuestra queja funcionó y a partir de la semana que viene la cosa cambiará). Y luego está la doña, que sigue igual de totufa que en el primer cuatrimestre... Qué bajón de cuatrimestre. Qué ganas de que acabe. Y pensar la de trabajos que aún tengo por hacer y el poco tiempo que me dejan para el libro... Y, lo peor, es que hay más gente en clase que piensa igual que yo. Y algunos ya han decidido dejar la carrera o se lo están pensando.
Y, como coincidencia, una frase que he leído hoy en el blog de mi amigo Txema: Después de tantos días perfectos, empecé a creer de verdad que toda la vida sería así. (Descubriendo Nunca Jamás, película que, por cierto, vimos Atte, Wil y yo el día de mi cumpleaños hace un par de años y que me gustó muchísimo).
En fin, lo mejor de todo... 3 minutos que me guardo para mí ;)
Y, como coincidencia, una frase que he leído hoy en el blog de mi amigo Txema: Después de tantos días perfectos, empecé a creer de verdad que toda la vida sería así. (Descubriendo Nunca Jamás, película que, por cierto, vimos Atte, Wil y yo el día de mi cumpleaños hace un par de años y que me gustó muchísimo).
En fin, lo mejor de todo... 3 minutos que me guardo para mí ;)
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